Felicidad: Condición interna de satisfacción según Wikipedia, en su definición antropológica las distintas culturas en la historia del mundo han establecido cánones distintos sobre ésta, para mí el paradigma espiritual encierra el significado más cercano, encontrarle sentido a la vida basándonos en una esperanza.
Si la felicidad se construye cada día, entiendo que depende de cada uno ser un poco más feliz que ayer y seguir intentando paso a paso, sin adelantarnos al precipicio, poniendo una escalera sobre este para seguir caminando.
Si en cambio hacemos las cosas a medias, tal vez seamos sólo mitad felices y eso es conformista, por qué elegiría tener sólo la mitad de un corazón si siempre he aspirado a tener uno completo.
Todos los días están llenos de varias dosis de subjetividad, todo depende del cristal con que se mire, mientras para mí lo que tú haces no está bien, para ti lo que yo hago puede estar mejor de lo que pienso y me estoy rompiendo la cabeza tratando de solucionar algo que en realidad no está mal.
Los ojos ven lo que quieren ver de la manera que desean, a veces simplemente no sabemos qué queremos, la tarea sería descubrir eso que queremos y aprender a pedirlo, primero a Dios si crees en él, o al universo, luego poner de tu parte claro y no parar hasta alcanzarlo, no puedes conseguir un objetivo sino sabes a donde apuntar.
Con el tiempo, que es corto, me he dado cuenta que frecuentemente nos cegamos de alguna manera, no vemos el paquete completo, el núcleo del asunto, en cambio nos concentramos en ligerezas, en eso que no es importante, hacemos las preguntas inadecuadas que no nos van a llevar a lo que realmente queremos, damos vueltas en círculo sin poder encontrar el camino, cuando hay un letrero gigante de salida en nuestras narices.
Lo dije antes y me reafirmo en ello, si te lanzaste a hacer cualquier cosa, al menos verifica que tengas paracaídas de reserva y que no haya tormenta, no puedes meterte al incendio sin protección, pero tampoco se puede vivir bloqueando emociones, hay que vivir para justamente vivir y no morir en vida, qué sería esta vida sino nos arriesgáramos, un vaso medio vacío y de esos uno ya está harto.
Si metes la pata, sácala antes de que se rompa porque todavía tiene solución, da y date las oportunidades que quieras en el momento que elijas, no esperes que los demás hagan lo mismo por ti porque en el mayor de los casos no será así y quién menos pienses te terminará dando la mano, el universo te desorienta y lo hace en un segundo.
La vida es un ensayo y error pero es muy corta como para andar pensando en todo, evaluando, haciendo excels, tablas de datos, listas con mil puntos, analizando pros y contras, mientras lo que hagas te permita dormir tranquilo (a) para qué te preocupas tanto.
Si tú te sientes bien ayudando a alguien que lo necesita, hazlo, si quieres pedir disculpas, también hazlo pero eso no significa que a ti también te den las disculpas que tanto esperas escuchar, debes parchar tú mismo tus heridas y no esperar mucho de las personas, así cuando ellas hagan lo que tú querías desde un comienzo, te sentirás sorprendido y no dolido porque no colmaron tus expectativas.
Tengo las mejores amigas, esto es un paréntesis en el post, siempre nos reunimos y cada una cuenta lo que le está pasando, le pasó o piensa que le pasará, ahí surgen miles de hipótesis y posibles soluciones a todo lo contado, en ese momento es en el que me doy cuenta que lo que yo interpreté como malo, no lo es, es simple percepción.
Si las palabras son tan efímeras como circunstanciales, vale más la pena concentrarte en hechos, sí la realidad de nuevo, una señal, un gesto, un ápice de interés termina siendo más significativo que un “quiero bajarte la luna y las estrellas” (consigue un cohete, construye una máquina y hablamos) más acciones y menos dichos, todo puede ser tan perfectamente incorrecto pero equilibrado a la vez, sirve demostrarlo.
Siempre hay un roto para un descosido, frase sabia conocida pero traída nuevamente a mí por la mamá de un buen amigo, no trates de ser algo o alguien que no eres, en algún lugar del mundo existirá alguien que te va a querer tal y como eres, y creo que de eso se trata reconocer las virtudes, tolerar los defectos y el resto es dejarte llevar.
Para mi, más que buscar agradarle a alguien, piensa primero en agradarte tú, el pensar en ti en primera, segunda y tercera persona, se que suena egoísta pero tienes que darte el tiempo para hacerlo también, sólo así vas a poder disfrutar más de lo que te rodea y sonreír sólo porque sí.
Si no le haces daño a terceros y menos a ti mismo, no hay de qué preocuparse más que de hacer lo que te haga feliz, teniendo las cosas claras vas a poder estar más tranquilo, deja los supuestos , si la libertad tiene un precio alto que realmente valga la pena dejarla.
Concluyo en que la felicidad es tan subjetiva como los propios sueños, recuerda que en el país de los sueños miran raro a los realistas, las propias ilusiones son colectivas pero complejamente individuales, no hay tanto que pensar, hay más por vivir.
Patch Adams. La película.