13 septiembre 2011

Complicadamente desprevenido


Este post iba a ser "por qué uno decide estar solo", pero mientras lo escribía, decidí dejar ese para después y darle paso a lo primero.

"El vacío es un espacio que espera ser llenado" (Gianmarco) Y es que no puedo escribir de la ausencia de amor dejándolo de lado, necesitamos la raíz.

Ponemos mil excusas, justificamos el miedo con la desconfianza, y poco a poco olvidamos que querer también es bonito; que no por gusto hay tantas canciones de amor, poemas de Benedetti y parejas felizmente casadas por más de 50 años.

No se ustedes, pero yo pienso que el miedo nos quita oportunidades, nos cierra puertas y hasta pequeñas ventanas, eso de que si va a pasar, pasará no es siempre cierto. También necesitamos poner de nuestra parte para que suceda.

Las cosas no caen del cielo, el amor no crece solo, lo se, mis últimos posts no han tenido mucho que ver con el amor, no se han centrado en él, pero tal y como me dijeron, cómo podemos ser felices sin amor? Es imposible, a veces cuando perdemos, ganamos, a veces cuando nos arriesgamos, terminamos ganando más que antes.

Siempre escribo que tenemos que ser cautelosos, que tenemos que protegernos, que no nos tiremos a la piscina porque puede estar vacía, al diablo todo, como dice una canción, sólo se vive una vez, no somos gatos como para tener siete vidas, para adelante no más.

Estás en la carrera de tu propia felicidad, una carrera que tiene muchas sub-metas, altas y bajas pero que en el camino te llevan a ser una mejor persona, a conocerte, saber lo que realmente quieres y por supuesto, ser feliz.

No se si se trata del "Don de fluir" de Drexler o "Oops de Johansen" no se mucho, en realidad se muy poco pero sí se que un hombre sin amor tiene una vida sin vida, y muertos vivientes abundan por ahí.

Creo que no sólo se trata de sentir, sino de expresar, de saber en qué momento hacerlo, de ser uno mismo y ya. Aquí no hay claves, ni fórmulas.

Cierro este post diciendo lo siguiente, escribir llena mi alma, como muy pocas cosas lo hacen, no se por qué sucede, pero es así de simple.

Eso de querer vivir siempre entre hologramas y estar mejor de ilusión en ilusión, es mentira, uno lo dice de la boca para afuera, quién no quiere algo más?. De repente, es sólo un sueño muy vago ahora, pero con esperanzas de volverse sólido, depende de ti.

Complícate si tienes que hacerlo, salta en un pie si estás feliz e irradia a todos de luz y buenas vibras. Total, la vida sería aburrida si fuera plana y ordinaria, por algo los días son diferentes, para que valores los buenos y los repliques de alguna manera.

Les dejo un poema:

Ese momento
A veces por alguna extraña razón
Olvidas respirar
A veces, y sólo a veces,
Dejas de creer y contar hasta diez.
Pero hay otras veces
En las que por un pequeño
Y mínimo instante
Bajas la guardia,
el hielo se descongela.
Y no importa cuanto
Hayas luchado
Ni el tiempo que te haya tomado
A veces, simplemente, te llega.

Canción sobre lo desprevenido:

Kevin lo describe muy bien aquí:

Esta escena es perfecta:




Por último una escena sobre las casualidades:


3 comentarios:

  1. Solo diré dos cosas: Me encanta como escribes y la segunda:

    "iuuu, andrea está templaaada!" jajajaja =) y ahora sí estoy muy feliz por eso! muaaak


    Paula :)

    ResponderBorrar
  2. Creo habértelo dicho ya, tanto amor y positivismo de tus entradas equilibra mi forma de pensar.

    "cómo podemos ser felices sin amor?" preguntas y yo te respondería: la felicidad depende de uno mismo, el amor (al menos el de pareja) es solo un factor que ayuda mucho en esa empresa de ser feliz, pero -desde mi perspectiva- no es indispensable.

    ResponderBorrar
  3. Me encanta como escribes!!... creo q es verdad algunas vces el compromiso nos aterra, pero también que no se trata de buscarlo desesperadamente ni tampoco pensar que no lo necesitamos o nunca lo vamos a necesitar sino que es necesaria una paciente apertura que implica un responsable discernimiento.

    Saludos y felicitaciones

    ResponderBorrar